Nada se pierde

...todo se transforma...

*En la quiniela, el 23 es la mariposa.


Se acercan los 23. Comienza un nuevo año personal. Me encuentra un poco ansiosa, y "no es para menos" me dijo un amigo, "cumplir años es un momento de balances". Quiérase o no, y aunque Einsten diga que el tiempo es una ilusión, uno siente que deja algo atrás y recibe algo nuevo
(gran mentira, es todo lo mismo).
Convengamos que al menos es una buena excusa para volver a empezar, para renovarse.

¡Espero con ansias al nuevo año que me da la bienvenida! Deseando recibir todas las gratas sorpresas que el Universo me tiene preparadas con tanta belleza!