Nada se pierde

...todo se transforma...

Dios existe.

Tomó una fibra verde un papel en blanco y escribió con letra firme e imprenta “Dios existe”.

Sus ojos estaban revolucionados, parecían querer explicar todo aquello que había vivido y no encontró dos mejores palabras que “Dios existe”.

Me dijo...donde mires, en cada rincon, en los ojos de Graciela que te invita a su casa sin conocerte...

por cualquier lado, en cada cosa...

"DIOS EXISTE"







y me fui mirando a mis costados...